PARROQUIA DE SAN AGUSTÍN
TEXTO EXTRAÍDO DE ABC
La parroquia de San Agustín se encuentra en un barrio residencial distinguido, la Colonia de El Viso, muy bien situado en Madrid, entre las calles María de Molina, Velázquez y Paseo de la Castellana, llegando casi hasta el Estadio Bernabéu del Real Madrid. Está formada por viviendas en buena parte unifamiliares.
Haciendo honor a la mente del santo que le da nombre, la parroquia está abierta a todo Madrid, ofreciendo un lugar de encuentro y de formación de calidad para aquellos que desean profundizar en la fe, tener acompañamiento espiritual y una atención sacramental personalizada.
Su localización geográfica céntrica, la facilidad de aparcamiento a su alrededor y la abundancia de los medios de transporte público, hacen de ella un lugar de reunión idóneo.
La parroquia se ha rejuvenecido últimamente en sus instalaciones y en sus actividades, adquiriendo un talante muy acogedor y alegre. Posee un marco material de una enorme belleza arquitectónica y artística, que favorece unas celebraciones alegres y luminosas, en consonancia con la liturgia divina y la buena educación de los fieles.
Prueba de ello es que, además de la pastoral ordinaria y de las diversas catequesis de preparación a los sacramentos, contamos con actividades para grupos como Emaús, hombres y mujeres, Effetá; Adoración Nocturna, Familias Anónimas, Vida ascendente y otros; cursos como "La fe de los primeros cristianos" e "Introducción a los Evangelios", impartidos por especialistas; Proyecto Amor Conyugal; catequesis para adultos, Cursos de formación afectiva y de voluntariado para jóvenes, grupos de oración de madres, etc. Pensamos que la fe se anima cuando se participa y se vive con los demás.
También desarrollamos la actividad caritativa de diversos modos, entre ellos cabe destacar un Rastrillo-Tómbola benéfica, que hacemos en noviembre. Es el primer rastrillo que se organizó en Madrid. Tiene una enorme tradición y mucha concurrencia. Los niños y mayores se lo pasan en grande. Mediante esta Tómbola ayudamos a asociaciones que se ocupan de los más necesitados (Albergues Sta. María de la Paz, Padre Enrique, Cottolengo, comedores de caridad, Cáritas, Karibú-Emigrantes Africanos, etc.).
El templo se levantó con la generosidad de los feligreses en el periodo 1945-50, años difíciles por la escasez de materiales como el hierro y el hormigón. Fue un proyecto emblemático y de laboratorio del arquitecto Luis Moya Blanco, también feligrés. Está muy bien construido y ornamentado. Más adelante, la fe y la generosidad de los parroquianos contribuyeron a levantar otras dos parroquias: la del Espíritu Santo de la Araucana y la de San Agustín de Alcobendas.
La filosofía de fondo que nos mueve es facilitar el encuentro con Dios y la formación. Estamos convencidos de que el futuro de la evangelización pasa por el despertar de los laicos y su implicación activa en la misión de la Iglesia. Por ello, acogemos todas las iniciativas razonables que se nos proponen en esa línea, siempre que tengan una clara vocación de servicio y pretendan el bien desinteresado de los demás. El lema que resume esa filosofía podría enunciarse como dejar actuar a Dios.